El maestro de la clase de Inés Temperina estaba explicando
ese día las palabras polisémicas y para ilustrar la lección inició un turno de
preguntas:
-
¿Quién sabe decirme lo que significa la palabra “vara”?
-
La vara, maestro – respondió Pietrino Malatesta, uno de los alumnos
más inteligentes de la clase – es un palo de madera con el
que se golpea a los animales para que obedezcan. También se puede utilizar
contra las personas para someterlas… Lo he visto en una película- añadió muy
serio.
-
Así es, Pietrino. Ese es uno de los significados
de vara… ¿Alguna otra aportación?
-
También puede ser la parte que se estira para
producir diferentes notas en un instrumento musical llamado trombón – intervino
Inés Temperina.
-
¡Estupendo, Inés! Además, ese significado me
gusta mucho más que el primero… Probemos con otra palabra, por ejemplo “cadena”.
Enseguida una multitud de manos se alzaron pidiendo
intervenir para dar sus respuestas.
-
Una cadena es un objeto que sirve para atar a un
animal para que no se escape. O incluso a una persona – respondió Margherita
Senzatetto.
-
Una cadena también puede ser un collar elegante – añadió Alessandro
Affamato.
-
¡O
una emisora de radio! – intervino premuroso Adriano Sognatore.
-
¡Incluso existen las cadenas de favores! – añadió Marta
Più.
-
¡Bravo, bravo! – exclamó entusiasmado el maestro
aplaudiendo con las manos.
-
También puede ser una cadena musical – dijo Inés
Temperina.
En casa de mi abuela hay una de ellas y
funciona con discos enormes de color negro que giran sin parar y producen un
sonido maravilloso.
-
¡Estupendo! Todas las respuestas hacen
referencia a diferentes significados de la misma palabra. Ésa es la magia de la
polisemia. Sin embargo, algunos significados son más bonitos que otros, ¿verdad?
Pensemos ahora en la palabra “cuerda”. ¡Adelante!
De nuevo un montón de manos levantadas y un agradable
algarabío de nerviosismo y prisas por intervenir.
-
Las cuerdas sirven para amarrar a un animal o una
persona para que no se de a la fuga – dijo de nuevo el veloz Malatesta.
- Sin duda… -añadió el maestro viendo cómo casi todos los alumnos bajaban sus manos decepcionados porque les habían arrebatado sus respuestas.
- ¿ Más significados de “cuerda”?- volvió a preguntar entusiasmado el maestro.
-
También puede ser una mujer que está bien de la
cabeza – dijo sonriente Marta Più.
-
O un mecanismo que llevan los relojes antiguos
para que funcionen… - añadió el pequeño Sognatore.
Más aplausos del feliz maestro.
- Una cuerda también es lo que produce el sonido en
instrumentos maravillosos como el piano o la guitarra… - añadió Inés Temperina.
-
¡Excelente! – intervino de nuevo el maestro. –
Todos son significados correctos de la misma palabra, aunque nuevamente unos me
gustan más que otros…
Alessandro Malatesta pensó que de nuevo le habían quitado un
poco el protagonismo que a él tanto le gustaba y un poco enfadado dijo:
-
Inés Temperina siempre utiliza la música para
todas las definiciones… No es justo.
A lo que el maestro añadió sonriendo:
-
Tus definiciones eran todas correctas,
Alessandro, no tienes motivos para enojarte. Pero debes saber que todo en la vida
adquiere un significado mucho más bonito gracias a la música. Incluso las palabras.
Y ahí quedó la cosa.
Al menos de momento...
Marcelo Morante
27/X/2020
Cierto... La música es un arte creativo todas las palabras que se utilicen aplicadas a su descripción y entendimiento "transmiten serenidad".
ResponderEliminarOtra percepción menos filosófica sería que no hay palabra mal dicha sino mal entendida, entendimiento condicionado por el estado interior de cada ser que escucha.
Gracias por tu hermoso comentario. Afortunadamente siempre nos quedará la música... Saludos 😘
EliminarMe ha encantado, estoy de acuerdo, con la música hasta el Ponte Sant'Angelo se ve más bonito!!!!
ResponderEliminarBendita música e inmortal Roma. ¿Qué más se puede pedir? Saludos 😘
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